04 Octubre 2011
10 de agosto, 2011
En inglés
Por Rebecca Ray
Tanto la minería como la manufactura no petrolera se redujeron a menos de la mitad de su tasa de crecimiento en el trimestre anterior.
El PIB de Ecuador creció a una tasa anualizada de 7,3 por ciento en el primer trimestre, más lento que el crecimiento del 11,0 por ciento en el cuarto trimestre de 2011. Aunque en el primer trimestre el crecimiento aún fue rápido, registró la primera caída en la tasa de crecimiento en un año. Durante los últimos cuatro trimestres, el PIB ha crecido un 7,6 por ciento, llevándolo al 7,8 por ciento por encima de su pico antes de la recesión de 2008-2009.
El crecimiento fue impulsado principalmente por la construcción y “otros servicios”. La construcción añadió 3,2 puntos porcentuales al crecimiento total del PIB anual, mientras los “otros servicios” (que abarcan restaurantes, bares, hoteles, comunicaciones, el alquiler de viviendas, servicios para empresas y hogares, la educación y salud) agregaron 2,4 puntos porcentuales. Juntos, estos dos sectores fueron responsables por más de tres cuartas partes del crecimiento del PIB en el primer trimestre. Sólo el sector de la administración pública (incluso la defensa y seguridad social) tuvo un impacto negativo al PIB. Sin la caída en este sector, el crecimiento anualizado del PIB habría sido de 0,6 puntos porcentuales más.
Nota: La fabricación incluye la manufactura de derivados del petróleo, y los “otros servicios” incluyen restaurantes, bares, hoteles, comunicaciones, el alquiler de viviendas, servicios para empresas y hogares, la educación y salud.
Entre sólo los sectores industriales (o sea, la producción de bienes), la construcción ha crecido mucho más rápido que ningún otro, más de tres veces la tasa de crecimiento de toda la economía desde la recesión. La construcción ha experimentado un crecimiento acumulado de 17,5 por ciento desde el primer trimestre de 2010, y duplicó esa tasa de crecimiento en el trimestre más reciente, acelerándose a una tasa anualizada de 36,6 por ciento, un 24 por ciento por encima de su pico antes de la recesión de 2008. Se ha registrado en sectores industriales conjuntos un crecimiento acumulado de 10,2 por ciento desde el primer trimestre de 2010, y esta norma ha permanecido en el primer trimestre de 2011, con un crecimiento anualizado del 10,7 por ciento, llegando a 7,7 por ciento por encima de su pico antes de la recesión.
Desde los otros grandes sectores industriales, la fabricación no petrolera ha crecido casi al mismo ritmo que la industria en general, mientras la agricultura y la explotación de minas y canteras han estado por debajo de otros sectores industriales. La fabricación no petrolera creció a una tasa anualizada de sólo 2,2 por ciento en el primer trimestre de 2011, llegando a un 7,6 por ciento por encima de su nivel en 2008. La agricultura ha crecido un 3,3 por ciento desde el primer trimestre de 2010 y se aceleró al 6,5 por ciento de crecimiento anualizado durante el trimestre más reciente, pero ha logrado sólo un 2,3 por ciento de aumento desde el nivel de 2008. La explotación de minas y canteras, que se contrajo más que cualquier otro sector industrial de importancia durante y después de la recesión, ha crecido un 8,3 por ciento en los últimos cuatro trimestres, pero se desaceleró a una tasa anualizada de 2,8 por ciento en el primer trimestre de 2011 y sólo alcanzó el 1,8 por ciento más que su nivel de 2008.
Entre los sectores de servicios, el que ha crecido más rápido es la categoría de “otros servicios”, que como se mencionó anteriormente, incluye restaurantes, bares, hoteles, comunicaciones, el alquiler de viviendas, servicios para empresas y hogares, la educación y salud. Ha crecido un 11,7 por ciento en los últimos cuatro trimestres, y se aceleró a una tasa anualizada de 15,2 por ciento en el último trimestre, alcanzando a un 14,7 por ciento por encima de su nivel de 2008 – casi dos veces el crecimiento de la economía total. Mientras tanto, la administración pública se contrajo a una tasa anualizada del 12.3 por ciento en el primer trimestre, lo que llevó a su crecimiento durante los últimos cuatro trimestres a sólo 0,03 por ciento. Después de haber crecido más rápido que la economía en general antes y durante la recesión, la administración pública se ha disminuido, creciendo aproximadamente un 0,2 por ciento anualmente en los últimos dos años.
Sectores de servicios en general han crecido un 7,2 por ciento en los últimos cuatro trimestres, y en el primer trimestre de 2011 crecieron a una tasa anualizada de 6,8 por ciento, superando sus niveles de 2008 por un 8,9 por ciento. Entre los principales sectores de servicios restantes, la logística (transporte y almacenamiento) se ha conformado al rendimiento de los sectores de servicios en general, mientras que el comercio ha crecido algo menos. La logística creció a una tasa anualizada del 8,4 por ciento en el último trimestre y el 4,7 por ciento en los últimos cuatro trimestres, llegando en el último trimestre a un 8,4 por ciento por encima de su pico pre-recesión, sólo 0,5 puntos porcentuales por debajo del sector servicios en su conjunto. El comercio se redujo más que ningún otro sector de servicios durante la recesión, pero desde entonces ha crecido hasta un 5,6 por ciento por encima de su pico pre-recesión, marcando un crecimiento del 6,3 por ciento durante los últimos cuatro trimestres y un crecimiento anualizado de 3,1 por ciento en el trimestre más reciente.
A largo plazo, la construcción y la administración pública crecieron más rápidamente que la economía global durante el último ciclo económico, pero después de la última recesión, la construcción recuperó su crecimiento anterior, mientras que la administración pública se disminuyó.
Entre los tipos de gastos, el crecimiento del PIB fue impulsado por el crecimiento de la formación bruta de capital fijo (FBCF) y del consumo privado, los cuales agregaron 5, 8 y 2,3 puntos porcentuales al crecimiento anual del PIB, respectivamente. También una mejora de la balanza comercial apoyó la economía, añadiendo 7,1 puntos porcentuales. Mientras tanto, el consumo del gobierno le quitó 0,6 puntos porcentuales del crecimiento del PIB, y cambios en el inventario removieron un 7,2 por ciento adicional.
Al fijarse en los componentes individuales, la FBCF ha crecido más rápido que ningún otro gasto no comercial. Ha crecido un 16,7 por ciento en los últimos cuatro trimestres, y se aceleró a una tasa anualizada de crecimiento de 20,3 por ciento en el más reciente trimestre, terminando en una subida del 12,3 por ciento con relación a su nivel de 2008. El consumo del gobierno, como el sector de la administración pública, se disminuyó en el primer trimestre de 2011, a una tasa anualizada del 5,8 por ciento, reduciendo la tasa de crecimiento al 2,7 por ciento. El consumo privado ha crecido más rápidamente que la economía en general desde la recesión, pero en el primer trimestre de 2011 se desaceleró a una tasa anualizada de crecimiento del 3,2 por ciento. Durante los últimos cuatro trimestres ha crecido un 7,6 por ciento, y actualmente se encuentra al 9,5 por ciento por encima de su nivel pre-recesión.
Por último, el déficit comercial se contrajo durante el segundo trimestre consecutivo, reduciéndose desde $ 910 millones en el tercer trimestre de 2010 a $734 millones en el último trimestre. Las exportaciones se aumentaron a una tasa anualizada del 8,7 por ciento, habiendo crecido en tres de los últimos cuatro trimestres. Las importaciones se contrajeron a una tasa anualizada de 7,8 por ciento. Sin embargo, en los últimos cuatro trimestres han crecido un 8,0 por ciento.
Cabe destacar que esta es la primera vez que las importaciones se han disminuido desde la recesión. Además es la segunda vez en los últimos ocho años que las importaciones se han reducido independientemente de una recesión.
Para concluir, la expansión de la economía de Ecuador continúa, con solamente un sector y una mayor clase de gasto llevando el crecimiento hacia abajo: el gasto público. Mientras tanto, se han registrado varios trimestres de crecimiento de dos dígitos en los sectores de la construcción y la inversión. Valdrá la pena observar si los inventarios y las importaciones se recuperan en los próximos trimestres.
